Docentes de música de todas partes comparten la misma preocupación: los niños ya no escuchan, solo oyen.
La sobreestimulación sonora hace que:
- cueste concentrarse,
- aumente la ansiedad,
- disminuya la sensibilidad auditiva,
- y se pierda la capacidad de disfrutar de la calma.
Frente a esto, la educación musical del siglo XXI debe ir más allá de la técnica.
El reto actual: alumnos que necesitan vivir la música, no solo aprenderla.
La propuesta: experiencias musicales activas, creativas y significativas
Musicando por la Tierra ofrece un concierto didáctico para que el alumnado descubra la música desde:
🎵 la exploración sonora
🎵 el ritmo corporal
🎵 el movimiento libre
🎵 la improvisación
🎵 la creación en grupo
🎵 la escucha atenta
🎵 la expresión emocional